Proyecto educativo

Nuestro proyecto educativo sitúa al alumnado en el centro de toda la actividad del Instituto Bonanova. Se trata de un modelo propio, centrado en las profesiones sanitarias y sociosanitarias y basado en la calidad, alrededor del cual se organiza toda la actividad docente, investigadora y de gestión.

Formamos profesionales exigentes y responsables

Ofrecemos a los estudiantes unos conocimientos técnicos superiores, en el contexto de una formación integral, incidiendo en la capacidad de autoexigencia del alumno. Esta formación les otorga una capacidad crítica en el momento de desarrollar su actividad laboral, así como los niveles de alta responsabilidad y exigencia asociados a los valores de las profesiones sanitarias y sociosanitarias. El objetivo último es fomentar un futuro desarrollo profesional responsable, con posibilidades de renovación y crecimiento intelectual.

Orientados al aprendizaje y al ejercicio profesional

Los estudios se basan en el aprendizaje de técnicas y procedimientos que aseguran la competencia profesional, pero también favorece la reflexión en torno a la acción de los alumnos. En este sentido, el profesorado utiliza metodologías orientadas a la participación y la implicación del estudiante en la formación que recibe, con el autoaprendizaje como muestra de autonomía y madurez del alumnado. Esta formación se complementa con estancias en centros de trabajo y se añaden al currículum básico materias sobre nuevas tecnologías de la información y tutorías de orientación laboral.

Pensando en la inserción laboral

Los estudiantes realizan prácticas profesionales en instituciones y empresas del sector, incorporados en el entorno laboral real de un equipo sanitario o sociosanitario. Este es un punto privilegiado de encuentro y conocimiento entre los futuros profesionales y las empresas, que aumenta la cualificación de nuestros alumnos y les facilita la inserción laboral.

Calidad, innovación y mejora continua aplicados al día a día

El Instituto Bonanova fomenta entre el profesorado y el alumnado el afán por la calidad y la mejora continua. Se favorecen los procesos de reflexión y discusión y, por tanto, de compromiso para que los cambios y las innovaciones sean fruto de la participación y la corresponsabilidad. En consecuencia, el proceso de innovación es permanente y se traslada a la actividad docente y de gestión cotidiana.